3ª Maravilla del Mundo Antiguo - Los Jardines Colgantes de Babilonia

Yo imaginaba que la magia de esta maravilla del mundo antiguo radicaría en algún avanzado sistema de cuerdas y poleas que sostenían jardines suspendidos sobre un barranco y que podían recorrerse casi a base de lianas a lo Tarzán, o algo así. Hay que ver lo ignorante que es una, pero también lo fantasiosa... Nada más lejos de la realidad. Los jardines colgantes de Babilonia eran unos jardines normales, bueno, grandiosos y ostentosos para el poder adquisitivo de la época, pero allí nadie hacía equilibrismo ni nada parecido. ¿Y por qué "colgantes"? Por lo de siempre, una mala traducción. Es que a veces la historia es como jugar al teléfono estropeado, porque va transmitiéndose de boca en boca, a base de manuscritos que se deterioran, se pierden se reinterpretan...y luego lo vengo a contar yo aquí y lo vuelvo a reinterpretar. Por tanto, aunque se dispone de algunas evidencias palpables de la historia como grabados, estatuillas y otros, siempre acaba variando, por muy exactos científicos que pretendamos ser.

Al nombrar los jardines en griego no se les consideraba "colgantes", sino "sobresalientes". Se trataba de presumir de jardines y lujo asiático ante la plebe que ni siquiera podía acercarse. Se demostraba así despreocupación por el ahorro y la moderación. Esa misma despreocupación que tiene quien gobernaba en semejante época. ¿Y qué época? ¿Queréis la versión femenina y minoritaria o la masculina y archiconocida?

Os doy las dos, por aquello de la igualdad.

La leyenda dice que Semiramis reinaba como regente de su hijo Adadnirari III, y que construyó estos jardines ya en el siglo XI A. de C. Conquistó India y Egipto pero se suicidó porque le salió el hijo conspirador y quería derrocarla. Podría contar más cosas, como que se dice que murió hecha paloma y yendo al cielo, o que se deshizo de su marido a la vieja usanza (o sea, mandándolo al otro barrio). Pero seguimos en el plano de la leyenda, y la versión más conocida está mucho más documentada.

Nabucodonosor II era uno de esos personajes que da la historia para que los abuelos cuenten verdaderos relatos novelescos a sus nietos y que éstos dejen de mirar la tele. Era hijo de Nabopolasar (otro que tal baila con el nombrecito), y tomó su relevo de conquistas en Oriente. Se hizo con Judá y Jerusalén entre otros. Después de luchar tanto se fue a su Babilonia querida, y se puso a construir edificios y monumentos, que al parecer, le causaban mayor orgullo que sus conquistas bélicas. Construyó los jardines "colgantes" para, según dice la historia, paliar la nostalgia que sufría su esposa de la tierra tan verde en la que nació. En Babilonia también estuvo la Torre de Babel, como se podría intuir, pero ésa es otra historia...

A Nabucodonosor II se le representa como un león fiero. Ello es porque, entre todas las menciones que se hacen de él en la Biblia, sobre todo en el Libro de Daniel, se cuenta que un día se encontraba presumiendo de sus logros, (es decir, contando batallitas). Yavhé (el Dios Judío) que según dicen las sagradas escrituras, tenía mucha peor leche que nuestro Dios, le humilló, y Nabucodonosor II, preso de la ira se fue al bosque rallado a más no poder durante 7 años, en los que se dedicó a vivir como y donde las fieras.

Volviendo a los jardines, hay muchos documentos babilónicos y griegos de la época, donde se habla de la ubicación y su arquitectura en terrazas. En la zona, aunque no exactamente donde detallan los textos, se han encontrado restos arquitectónicos semejantes a los que constan en las descripciones. Pero de los jardines, lo que son los jardines, ni un tiesto.

Espero que hayáis pasado un buen rato.