Hemos sido testigos de la primicia:
Consecutivas, no en pareja, sino en coordinado planeo,
gallardas y bicolores,
atravesando con precisa línea recta la Plaza,
en dirección de la Mariseca,
opuestas a mi vuelco en el corazón,
previas a San Blas y con rama de futuro nido en el pico.
Las dos primeras cigüeñas anidando en la ciudad.
Bienvenidas.
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Omán
Hace 5 semanas
4 comentarios:
como me gusta tu sensibilidad...
Un placer compartirla contigo, Anónimo.
La mayoría ya no se van. Zamora está repleta de cigueñas todo el año.
Ya, en Salamanca es igual, pero se conoce que cada año cambia la moda en cuestión de nidos y han de remozarlos. :-)
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